Cuenta de flujos de materiales. 2022
El consumo doméstico de materiales (CDM) de la economía catalana fue de 44,0 millones de toneladas el año 2022, cifra que representa 5,6 toneladas por habitante, es decir, una disminución del 9,5% respecto a un año atrás. La productividad material se situó en 6,2 euros por kg, con un incremento del 21,3% respecto al año anterior.
El principal componente del CDM es la extracción doméstica, que fue de 33,6 millones de toneladas, mientras que el balance comercial físico con el exterior se situó en 10,4 millones de toneladas.
Con respecto a la extracción doméstica, los materiales con más peso fueron los minerales no metálicos (un 78,4% del total) y la biomasa (un 21,6% del total). La extracción de minerales metálicos y los combustibles fósiles fue nula.
En cuanto al balance comercial físico con el exterior, fue de 10,4 millones de toneladas, con unas importaciones de materiales de 89,0 millones de toneladas, que superaron las exportaciones (78,6 millones de toneladas). Por territorios, la balanza con el extranjero se situó en 15,6 millones de toneladas, mientras que con el resto del Estado Cataluña fue exportadora neta materiales, con un saldo negativo de 5,3 millones de toneladas.
En relación con los materiales liberados al medio ambiente después de ser utilizados en la economía catalana (output doméstico procesado), el componente principal fueron las emisiones de CO2 en la atmósfera, que se situaron en 40,3 millones de toneladas y que equivalen a 5,1 toneladas por habitante.