Encuesta de clima empresarial. Módulo de actualidad empresarial. T1/2025

En el primer trimestre de 2025, el 27,1% de los establecimientos empresariales de Cataluña declaran tener relaciones económicas, directas o indirectas, con algún país de fuera de la Unión Europea: el 15,0% incluyendo los Estados Unidos y el 12,1% sin ellos.

Entre los establecimientos que tienen relaciones económicas directas o indirectas con algún país de fuera de la UE, el 55,2% están muy o bastante preocupados por una subida de los aranceles (12,0% mucho y 43,2% bastante), mientras que el 44,8% están poco o nada preocupados por este hecho. Por tamaño, los establecimientos de 50 ocupados o más son los que declaran los porcentajes más elevados de preocupación: el 59,0%. Por otro lado, el grado de preocupación es más elevado en los establecimientos que tienen relaciones económicas con los Estados Unidos, declarando un 59,0% estar muy o bastante preocupados por una subida de los aranceles (16,7% mucho y 42,3% bastante), mientras que para los que tienen relaciones económicas con países de fuera de la UE pero no con los Estados Unidos, este porcentaje es del 50,6% (6,2% mucho y 44,4% bastante).

Asimismo, el 66,8% de los establecimientos con relaciones económicas con países de fuera de la UE prevén que los costes de su negocio se incrementarían en el caso de una subida de aranceles. Por otro lado, el 26,6% declaran que una subida de aranceles no tendría ningún impacto en los costes de su negocio y el 6,7% declaran que los costes se reducirían.

La principal estrategia que adoptarían los establecimientos si algún país con el cual tienen relaciones económicas aplicara o sufriera una subida de aranceles sería repercutir el incremento de los aranceles en el precio final (72,9%). Le siguen la reducción del margen de beneficio (54,2%), el inicio o la intensificación de las inversiones y ventas dentro del mercado de la UE (54,1%) y la modificación de la cadena de suministro mediante la diversificación de proveedores (53,6%). El 41,9% de los establecimientos abrirían o potenciarían nuevos mercados de venta fuera de la UE, mientras que la estrategia de trasladar la producción (o una parte) al país que incremente los aranceles cuenta con el porcentaje más bajo de establecimientos que adoptarían dicha estrategia, el 12,3%.

En relación con las acciones que los gobiernos deberían emprender para minimizar el impacto de una subida de los aranceles, la opción declarada con más frecuencia por los establecimientos (94,3%) son las negociaciones y la diplomacia comercial a nivel político (diálogo bilateral o alianzas internacionales para mejorar las condiciones de exportación). Le siguen el fomento de la producción local (simplificación administrativa y normativa, más formación, más innovación...) con el 90,4% y la reducción de los costes logísticos (mejorar infraestructuras y reducir costes aduaneros) con el 90,2%.

El 48,2% de los establecimientos con algún tipo de relación económica con países de fuera de la UE declaran que un posible fortalecimiento del dólar afectaría de forma negativa su negocio. Por sectores, este porcentaje es más elevado en los sectores del comercio (59,6%) y de la industria y la construcción (49,9%) que en la hostelería y el resto de servicios (40,3%).